No bien terminaban su llamado “a los diferentes servidores públicos del Estado para que dejen de intervenir en el libre desarrollo de nuestros procesos electorales malversando recursos y pactando deliberadamente con sectores universitarios la designación de un Rector o Rectora, del Estado autoritario ya que no representa los intereses de la comunidad universitaria”, cuando catorce oficiosos diputados adictos al precandidato a gobernador Salomón Jara y al convicto Eduardo Martínez Helmes, se unieron al griterío. Vean lo que dicen:
“La autonomía que le reconoce expresamente la ley a la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, en los últimos meses, se ha visto amenazada por el Gobierno de Oaxaca, que ha tratado de imponer el nombramiento de un nuevo Rector, violentando tajantemente su Ley Orgánica.
“Esto se da luego de que un Juez vinculó a proceso al ex Rector Eduardo Martínez Helmes por defraudación fiscal que, con evidentes inconsistencias dentro de su proceso, pasó de prisión preventiva a prisión domiciliaria; relacionado con este hecho, se ha denunciado públicamente el acuerdo político, de operar la mayoría en el consejo universitario que garantice entregar al PRI-Gobierno el mando universitario, trabajo que se hace coordinadamente entre el Gobierno del Estado, el ex Rector y el candidato que quieren imponer como nuevo Rector”.
¿No que fuera mano negra de la Universidad?