Por Cipriano Miraflores
Hay un acuerdo teórico de que la República es lo contrario a la Monarquía. La República es un gobierno de las instituciones, mientras que la Monarquía es un gobierno personal, por ende, la República es un gobierno de las leyes. La República es un gobierno de intensa participación de los ciudadanos en los asuntos públicos, es una cuestión de los ciudadanos, mientras que la Monarquía gobierna sobre súbditos que su obligación es la obediencia.
Si somos observadores, México tiene más parecido a una Monarquía que a una República, hasta el Presidente vive y despacha en un Palacio, parece que Claudia Primera seguirá esta tendencia monarquil.
A los mexicanos nos ha costado ser República, recuérdese que la República es todavía una aspiración, entre monarquicos como Iturbide y Maximiliano, entre dictadores liberales como Juárez y Porfirio Díaz, entre dictadores revolucionarios desde Carranza hasta Zedillo, entre Presidentes autoritarios como Fox, Calderón y Peña Nieto, y el tirano de la Cuarta Transformación Andrés Manuel López Obrador, la República ha estado ausente, los tiempos de la República han sido mínimos.
Según pinta la cosa, seguirá la tiranía, ahora en forma dual: AMLO y Claudia.
Creo que los mexicanos debemos de buscar la República y no abandonarla jamás. Los gobiernos unipersonales es de locos, de monarcos, dictadores, autoritarios, presidenciales y tiramos, no son buenos para México.
Por cierto, la conferencia de Zedillo, molestó a más de uno. Es hora del análisis serio de la Cuarta Transformación y del Obradorato.
Así las cosas, en vía de mientras sean rabiosamente felices.
