Las modificaciones planteadas a la Ley Federal del Trabajo y la Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, buscan extender la democracia sindical más allá del derecho de los agremiados a elegir a sus dirigentes.
La iniciativa plantea que la convocatoria de revocación, se emita con firma autógrafa de por lo menos el 33% de los afiliados.
La reforma, busca ampliar la rendición de cuentas de ingresos por cuotas sindicales, a “los apoyos económicos o en especie que en su caso entregue el patrón”.
Con información de El Economista