Los que tratamos de guardar las indicaciones de las autoridades sanitarias para evitar contagios de Covid 19 hemos visto la semana pasada con mucha preocupacion, como miles de mexicanos se volcaron a los disntintos destinos turisticos del pais, con el fin de pasar la “semana Santa” y en muchos lugares aun continuan los turistas disfrutando del sol y la playa.
Esperemos que no se de, pero los expertos presagiaban una tercera olade contagios en todo el pais, debido a que las autoridades federales ordenaron pasar al semaforo amarillo, un color que indica que no hay mucho peligro, que se pueden hacer muchas actividades, cuando en realidad el pais entero no estaba para pasar a ese color de semaforo epidemiológico.
Entendemos la presion de los prestadores de serivicios turisticos del pais, entendemos la preocupacion de la iniciativa privada que insitía en abrir sus establecimientos comerciales, finalmente el gobierno federal cedió y dió la indicación de pasar al semaforo amarillo y miles de mexicanos se la creyeron, pensaron que ya estaba superada la crisis epidemiológica y asi fue como se dirigieron a los diferentes destinos turisticos.
No hablemos de Cancun, Puerto Vallarta o Acapulco y sus eternos pleitos con los habitantes de la ciudad de Mexico y en especial ahora con los de tepito, centremonos en nuestro estado, desde la semana pasada comenzo a llegar el turismo a las hermosas playas oaxaqueñas, las cuales en cuestion de horas se vieron abarrotadas, y aunque los prestadores de servicios turisticos reportaban ocupaciones hoteleras muy bajas, lo cierto es que en muchos lugares no habian cuartos de hotel disponibles.
En la region istmeña la gente llegó a ver a sus familiares y de paso a relajarse un rato y de igual manera se notó muy fuerte el incremento de personas en las distintas comunidades de la zona del Istmo de Tehuantepec, pero en donde si se rebasaron las espectativas fue en la capital del estado, tuvimos por lo menos tres dias saturados de turismo nacional e internacional, literalmente no se podia ni caminar en el andador turistico, mucha gente sin cubrebocas, sin sana distancia.
Los restaurantes oaxaqueños estaban a reventar, saturados hasta decir basta, sin guardar los protocolos sanitarios y muchos turistas tuvieron que hacer colas de hasta dos horas para entrar a esos lugares y disfrutar la rica gastronomía oaxaqueña.
Lo peor de todo es que poco a poco han comenzado a irse los turistas y muchos de ellos asintomáticos dejaron seguramente el virus y pronto se estarán prese tando mas casos de covid, es algo que no queremos, es algo que a nadie le deseamos, pero la realidad es evidente, le gente abarrotó las calles, los prestadores de servicios turisticos muy felices pudieron recapitalizarse un poco.
Ahora solo queda esperar que esa tercera oleada de contagios que tanto han mencionado los expertos en el tema, no se presente, de lo contrario veremos de nuevo no solo a Oaxaca, sino a todo el pais sumido en el temor y el panico, los hospitales no estan al cien por ciento listos para atender a tanto paciente aunque las autoridades digan que si lo estan, los médicos estan cansandos, las enfermeras ya no pueden mas y ahora la irresponsabilidad de miles de mexicanos de nueva cuenta nos expone a una nueva ola de contagios, como dije, espero que no se presente.
