Con 77 mil 302 casos registrados, las personas de 25 a 44 años de edad son las más afectadas por Infecciones Respiratorias Agudas (IRAs), así lo informó los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
La presencia de síntomas como tos, escurrimiento y obstrucción nasal, dolor de garganta, de oído, respiración ruidosa o dificultad respiratoria con o sin fiebre, la población debe acudir a la unidad de salud más cercana para su atención, principalmente en menores de edad.
De acuerdo con los indicadores, el segundo grupo de edad más afectado es de 1 a 4 años que contabiliza 63 mil 670 casos; le sigue el de 5 a 9 años de edad, con 61 mil 809 casos.
Durante la semana epidemiológica número 35 se han notificado 402 mil 769 casos de IRAs, ubicando a la entidad en el lugar número nueve a nivel nacional, por debajo del Estado de México y la Ciudad de México que son los más afectados.
Por Jurisdicción Sanitaria, actualmente Valles Centrales registra 172 mil 770 casos, seguido del Istmo con 73 mil 568, Tuxtepec 29 mil 698, Costa 40 mil 546, Mixteca 57 mil 425 y Sierra 28 mil 762 casos.
Actualmente, 20 municipios presentan casos de IRAs, por lo que la institución exhorta a madres y padres de familia que en caso de detectar en la población infantil los síntomas antes mencionados, eviten que vayan a la escuela, y por el contrario, acudir al médico para su atención y de esta forma evitar la propagación de la enfermedad.
Además de evitar acudir a lugares concurridos, las personas deben cubrirse con el ángulo interno del codo al toser o estornudar, no estar cerca de quienes fuman y llevar una alimentación adecuada.
En el caso de las y los menores de edad, se debe continuar con la lactancia materna o leche que toman actualmente y con su alimentación habitual.
Aunado a mantener el esquema de vacunación al corriente, las personas deben usar cubrebocas al presentar síntomas respiratorios, ya que esta medida ha sido efectiva para que no se presenten picos de contagios.
Otras medidas a considerar es la ventilación de habitaciones u oficinas, abrigarse adecuadamente, evitar los cambios bruscos de temperatura, beber abundante líquido, principalmente agua simple o té y no automedicarse.