ULISES, SUS INFORTUNIOS

0
303

Por Felipe Sánchez

-Escaparate Político

Desesperado por el ostracismo político en el que lo tienen sumido sus adversarios políticos dentro del mismo PRI, el ex gobernador Ulises Ruiz Ortiz cayó en la desesperación y cometió el error de tomar la sede de la dirigencia nacional de su partido. La verdad es que fue por lana y salió trasquilado. Es decir, no lo escucharon siquiera. Menos hablaron de darle algo. Dicen que la fría banca del desempleo es muerte lenta para un político. Es lo que pasa con URO.

Según las crónicas periodísticas no obtuvo ningún resultado positivo por lo que el pasado lunes, con la misma sorpresa con que llegó se retiró con sus acarreados, incluyendo a Nallely Gutiérrez. Con la acción de sus huestes dejó en claro lo que aprendió de los rijosos que intentaron echarlo del poder en el 2016: la violencia.

Algunos comentaristas que ignoran la riqueza incalculable con que termina la mayoría de los gobernadores de Oaxaca -algunos hasta hospitales privados se mandan construir- pecan de ingenuos y se preguntan ¿Quién financió?

El Universal dice, por ejemplo: las huestes de Ulises Ruiz y Nallely Gutiérrez finalmente liberaron los accesos a la sede nacional del PRI, pero nos dicen que al
interior del partido lo que aún se mantiene es la incógnita de quién pagó el plantón durante casi una semana.

La secretaria general del PRI, Carolina Viggiano endureció su crítica contra el derrotado Ulises. Insistió en saber quién pagó y de paso insistió: ¿De qué ha vivido Ulises Ruiz los años que lleva sin trabajar desde que dejó el gobierno de Oaxaca?

Aunque nadie le creyó, el mismo Ulises dijo a los que lo oyeron que el plantón fue financiado con “una coperacha” entre los manifestantes que son muy solidarios con su movimiento”.

Para otro medio, el mismo ex gobernador explicó que su graciosa huida “es un repliegue táctico”.

Lo cierto es que los priistas dispuestos a defender la dirigencia de “Amlito” se cuentan con los dedos de la mano y sobran, aunado a que la mayoría tricolor desaprueba la práctica tan común de los políticos oaxaqueños como es  la toma violenta de instalaciones oficiales.
Dicen que en el pleito entre esos bandos priistas no hay buenos ni malos. Ambos están bajo sospecha.

DESINFORMADO

Aunque el polémico ex gobernador oaxaqueño formó parte de la cúpula política del país, tanto tiempo en la banca parece que lo tiene desinformado, se desfasó los tiempos políticos.

Digo esto porque Ulises arma su alboroto de la toma del PRI precisamente cuando algunas decisiones de Estado giran en torno al partido tricolor. Según los últimos trascendidos periodísticos, tras los resultados electorales del pasado 6 de junio, el partido tricolor se convirtió en la organización política “bisagra” de la próxima legislatura en la Cámara de Diputados, de acuerdo con la consultora Integralia, que considera que la solidez del bloque opositor dependerá del comportamiento de los priistas.

“Es posible que la coalición oficialista (Morena y aliados) busque coaliciones eventuales con el PRI para alcanzar la mayoría calificada requerida para modificar la Constitución”, señala un informe realizado por dicha consultora encabezada por Luis Carlos Ugalde, expresidente del antes Instituto Federal Electoral (IFE).

MUJERES EN POLÍTICA

Pese a los vientos de cambio en las políticas de género en nuestro país, en Oaxaca muy pocas mujeres, de todos los partidos, se atreven a jugar en las grandes ligas como para entrarle a la competencia del relevo gubernamental.

En el Morena, por ejemplo, el mandamás Andrés Manuel López Obrador metió como candidata a senadora, casi con calzador y en medio de discutida polémica vía twiter, a Susana Harp Iturribarría. En Morena parece ser la única mujer con impulsos para ser candidata. En Tuxtepec, le preguntaron sobre el tema y dijo lo mismo: hay que esperar la convocatoria y los tiempos de su partido.

En el PAN hay tres damas que, con sus asegunes, podrían estar en la lucha por la sucesión, pero el año electoral ya corre y no les vemos decisión. Alejandra García Morlán quiere, pero arrastra lastres muy notorios: el debilitamiento político de su mecenas Javier Corral y sus intereses en el tráfico de concesión de obras públicas. Está Natividad Díaz Jiménez muy cuestionada por el cacicazgo que mantiene como sempiterna dirigente local de su partido y su grotesco nepotismo. Ella y su hermano son diputados electos. Anoten también a la ambivalente Eufrosina Cruz Mendoza que navega entre los amores del PRI y del PAN.

En el PRI no hay mucha tela de donde cortar. La única diputada local con la talla para competir sería Mariana Benitez.