¿SOMOS AGACHONES?

0
604

MUCHAS y variadas fueron las reacciones sobre el profundo análisis que hace el investigador de la UNAM , Pablo Latapí, en torno a los abusos del sindicato magisterial y su cómplice, el gobierno, por la permanente violación del artículo tercero constitucional “a ciencia y paciencia” de los padres de familia, dado a conocer en mis dos últimas entregas.

EN EL CASO de Oaxaca, hace renacer mi optimismo el hecho de que a los eternos -desde hace 30 años- caciques de la sección 22 del SNTE, empiezan a sentir lo de aquel ilustre manipulador que no reparaba en que “se puede engañar a pocos mucho tiempo o a muchos poco tiempo, pero imposible engañar a muchos mucho tiempo”.

LOS COMENTARIOS sobre el autoritarismo y los abusos (peores que los de la gran cacique ELBA ESTHER GORDILLO), de esos “maestros” que se dicen “democráticos” pero actúan apartados totalmente de las prácticas democráticas porque no buscan acuerdos sino imponen, someten, agraden, son diversos pero voy a transcribir dos, como muestra.

EL PROFESOR que se identifica en su correo como Luís Díaz Cruz dice:

Señor «analista» borregos hay dondequiera, hasta entre los periodistas o no? (sic) no niego que muchos de los maestros si se dejen llevar por los intereses personales de un cambio o un préstamo o lo que tu quieras, pero también es cierto que las criticas al sistema son con argumentos reales, aunque también en la sección 22 hay corrupción, dime tu donde no la hay, ya basta de aplaudir a los gobiernos cuando hay «chayotazo» entre ustedes y de criticarlos cuando no los maicean, por este tipo de medios es como en México se cometen las peores infamias y todo esta bien, o creen que el pueblo es tarado o ya nos tragamos el cuento de que Calderon y Ulises (tu patrón) ganaron las elecciones? (resic) ahora resulta que todos son unos tarados si no pensamos como nuestros analistas políticos dicen.

En fin allá tu y tu conciencia si deveras estas convencido de lo que dices, que bien pero si eres uno más, te repito pobre país de arrastrados y lamebotas. Sobre la protesta de ellos o cualquier gremio, creo que alguien debe alzar la voz, o segun tu todos debemos ser agachados como los jilgueros del porfirismo. Espero que tengas el valor de leer esta critica, al contrario que tu, es probable que me falte información, si lo dices porque es conveniente para ti lo entiendo, pero si no, QUE MENTALIDAD TAN AGACHONA. Lo anterior lo digo porque he leído tus artículos, y no muestran mas que la frustración de no estar o entre los politico o entre estos lideres que no se niega, por un lado critican y por otro cobran mientras los «borregos» (la base magisterial) están convencidos de que por la lucha se logran los cambios.

OTRO CORREO

EN OTRO correo, con una apreciación totalmente opuesta al anterior, el lector Sergio Gabriel García Pimentel, me dice lo siguiente:

C. Felipe Sánchez soy asiduo lector de su columna como muchos otros que creemos dice lo más cercano a la verdad de lo que acontece en nuestro entorno. En su comentario de hoy sorprende la información de lo que no sabemos que pasa por no comprar el periódico o adquirir “el azul” que es muy tendencioso. Por eso se pierde uno de lo que puede orientar al pueblo en la defensa de sus derechos y además nos permite quitarnos la mordaza y saber que todo lo malo que pasa en las escuelas de todos niveles para no engañarnos con lo que nos dicen a través de los medios, radio y prensa, que están al servicio de la sección 22. Es bueno saber la verdad porque esto nos servirá como base para auditar, revisar los cientos de casos en los cuales la exigibilidad y la justiciabilidad pudieran ser invocados, porque el narcotráfico, abusos, huelgas, injusticias, cierre de escuelas, etc. se dan en el marco “democrático” de las escuelas donde acechan los enemigos del pueblo que adiestran a los futuros appos. Ojalá que sirvan sus palabras para que Goliat sea abatido por la mejor arma que es la decisión de los padres de familia de velar por los derechos de los niños y jóvenes a los que se les niega el derecho a la educación. Está bien que los maestros busquen mejores salarios, vivir mejor, pero que no abusen impidiendo la formación de los ciudadanos justos del mañana. Gracias.

BIENVENIDO los comentarios. Lo importante es que me lean. Sabido estoy que los periodistas no escribimos exquisiteces literarias. Somos, casi siempre, entes agudos y observadores, indagadores siempre de los abusos, no somos bien vistos por los que detentan algún grado de poder, ellos nos verán siempre como el periodista ácido y corrosivo, mordaz, satírico. Nuestro oficio no es, para muchos, agradable pero muy necesario.

Compartir
Artículo anteriorILUSO
Artículo siguienteTENER UN DIPUTADO ASI
Autor de Escaparate Político desde 1977 consolidada como una de las columnas de mayor permanencia. Dos veces Premio Estatal de Periodismo; Premio México de Periodismo de la Federación de Asociaciones de Periodistas de México. Socio fundador de la Asociación de Periodistas de Oaxaca. Corresponsal (Oaxaca) de la gran cooperativa de Excélsior hasta su privatización.

Dejar respuesta