FOCOS ROJOS

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DE VERDAD que las autoridades deben estar más que alertas ante esta nueva modalidad de presuntas protestas en las que los pseudos líderes radicales ya hasta andan privando de la libertad a elementos policíacos, la gravedad consiste en que éstos últimos son quienes ostentan la investidura de la “fuerza” del estado.

SUPUESTAMENTE para exigir la salida del presidente municipal San José del Progreso, Venancio Martínez Rivera, 5 miembros del ayuntamiento y policías fueron retenidos por detractores a ese gobierno municipal.

SAN JOSÉ DEL PROGRESO, que más bien debiera llamarse San José del estancamiento, no podrá salir de su desventajosa situación socioeconómica mientras sus acciones sean manejadas por esos agitadores profesionales que se oponen, so pretexto de la destrucción del Medio Ambiente, a la instalación de la empresa minera Cuzcatlán.

Para el comisionado en Oaxaca de Unidad Nacional Progresista (UNP) Francisco Vásquez, las declaraciones del edil de San José del Progreso ante los medios de comunicación, no son más que palabras endulzadas a modo, pues a pesar de los señalamientos y reclamos de la mayoría de ciudadanos de la comunidad. Oscar Venancio Martínez Rivera olvidó citarse entre el grupo de agitadores, vándalos y mercenarios que transgreden la sana convivencia de ese pueblo.

EN RECIENTES declaraciones, el dirigente de la UNP aseguró, que si el edil Oscar Venancio Martínez Rivera desea en realidad devolver a sus “gobernados” la tranquilidad, debe comenzar por reconocer sus errores, el despotismo e intolerancia que marcó a su gobierno desde su inicio, así como su falta de oficio político e irresponsabilidad con la que ha enfrentado la embestida de sus enemigos personales (no del pueblo en general como él asegura) atizados por los pepenadores de todos los conflictos sociales, como son la sección 22-CODEP-APPO, bien asesorados por el curita de la zona.

ALERTA

Por tal razón, Francisco Vásquez, califico de cínico e irresponsable al presidente municipal de San José del Progreso, quien a costa de todo ha tratado de ocultar a la opinión pública uno de los verdaderos motivos del conflicto en la comunidad que dice gobernar. Lejos de buscar salidas viables al problema político personal que atraviesa, se le ocurrió crear un grupo de choque con gente como Germán Servando Arango y Georgina Gonzáles con su organización que llaman “San José Defiende Nuestros Derechos”, mismo que solo agrupa a familiares y algunos amigos y sirve para amenazar y golpear sus los adversarios que, debido a su ignorancia, se han dejado manejar por activistas profesionales de la APPO. En realidad lo que hacen los adversarios del presidente municipal es cobrarle la factura por haberlos marginado a su arribo al gobierno municipal de San José del Progreso.

Francisco Vásquez, conocedor a fondo del conflicto que tiene en un vilo la tranquilidad social en ese pueblo del valle de Ocotlán, dice que resulta muy sospechoso que hasta hace unos días, Venancio Martínez, haya medio reconocido la intromisión en el conflicto que puede bañar en sangre a San José del Progreso, de personas como Gabino Cue, Salomón Jara, Benjamín Robles, Wilfredo Vásquez, Wilfredo Mayren Peláez, Azael Santiago Chepi, Gabriel López Chiñas y sus brazos ejecutores Claudia Tapia y Castulo López.

Esos son nombres y apellidos que la UNP ha exhibido públicamente desde hace varios meses, y que por razones de conveniencia, el edil trató de ocultar, a pesar de ser señalados directamente como autores intelectuales del conflicto y del posible baño de sangre en San José del Progreso que cada día se ve más cercano.

SI EL GOBIERNO realmente quiere evitar la violencia en ese pueblo e impedir que los grupos radicales de la sección 22 obtengan un nuevo mártir con otro muerto que es lo que están buscando con las constantes provocaciones violentas, debe resolver, con decisión, el conflicto tan manoseado.

LO MÁS factible, dice el dirigente de la UNP , es la desaparición de poderes en San José del Progreso, la designación de un administrador y la aplicación de todo el peso de la Ley contra quienes, con sus estrategias de agitación, envenenan a los ciudadanos que ignoran el fondo del conflicto y los inducen a cometer actos fuera de la ley, tales como los bloqueos a las vías de comunicación, toma de edificios públicos y lo mas grave, la reciente privación ilegal de la libertad en agravio de regidores y policías municipales del municipio en cuestión.

RESULTA más que inexplicable que el gobierno siga guardando silencio ante tantas mentiras de los activistas de La APPO. Se han negado sospechosamente a explicar con claridad las condiciones legales y ambientales bajo las cuales opera la empresa minera Cuzcatlan, esto para disipar las dudas entre los verdaderos habitantes de San José del Progreso y no dar bandera a los rijosos para generar inestabilidad social. Es urgente que el gobierno busque con decisión la solución del conflicto hablando con la verdad o ¿acaso esconde algo? Es necesario devolver la calma a ese marginado pueblo cuyos nativos lo único que piden es que los dejen convivir y trabajar en paz.

LA INDECISIÓN del gobierno hace que los dirigentes de la Sección 22 tengan pretexto para seguir ensayando en ese pueblo sus tácticas guerrilleras.

HACE dos días llegaron a Oaxaca un grupo de doce activistas de San Salvador Atenco, para reforzar las actividades de desestabilización, pero ni las fuerzas de seguridad ni el cuerpo de inteligencia del Estado, se ve que estén tomando providencias.

EL ASUNTO se torna demasiado riesgoso y aún así no se ve que el gobierno de URO tenga voluntad política de cortar por lo sano.

EXCITADOS por los grupos políticos adversarios del gobernador, los agitadores profesionales han centrado sus acciones en San José del Progreso. No hay que olvidar que en la década de los 90, el edil Martínez formaba parte del grupo de perredistas radicales de la comunidad, entre los que se encontraban Hilario e Ignacio Vásquez Gómez, Bernardo Méndez Vásquez, Apolinar García Sánchez entre otros, a quienes representantes del CDE del PRD en Oaxaca, tomaron protesta como comité municipal de ese instituto político en San José del Progreso en la víspera de la elección a gobernador en 1998.

CON ESA representación y rodeado de los antes mencionados, mismos que ahora se convirtieron en sus peores enemigos, Oscar Venancio Martínez intentó infructuosamente ser presidente municipal en 1998.

En los momentos más críticos del conflicto del 2006, Venancio Martínez y sus amigos ex militares se trasportaban armados en varios vehículos hacia la ciudad de Oaxaca para reforzar algunas barricadas. En 2007 mediante chantajes y amenazas de exhibir la corrupción y desfalcos realizados por el edil saliente, Amadeo Vásquez Rosario, el hasta entonces operador de retroexcavadoras, Venancio Martínez Rivera, alias “El Veno”, logra ser presidente municipal y vean lo que está haciendo de su pueblo.

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Autor de Escaparate Político desde 1977 consolidada como una de las columnas de mayor permanencia. Dos veces Premio Estatal de Periodismo; Premio México de Periodismo de la Federación de Asociaciones de Periodistas de México. Socio fundador de la Asociación de Periodistas de Oaxaca. Corresponsal (Oaxaca) de la gran cooperativa de Excélsior hasta su privatización.

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